
La Ruta de las Mil Kasbahs, también conocida como Ruta de las Caravanas, es sin lugar a dudas uno de los mayores atractivos turísticos de Marruecos y destino casi obligado para los que visitan el país desde Marrakech, muy útil para todos aquellos que quieren conocer en profundidad Marruecos.
Un itinerario por el que se llegará a multitud de ciudades y pequeños pueblos que nos permiten descubrir un poco más la cultura bereber que se desarrolla entre estos exóticos paraísos.
Pero antes de entrar más en detalle de la Ruta de las Mil Kasbahs os vamos a contar -Qué son las Kasbahs
De entrada deciros que a pesar de su exótico nombre es un monumento que al viajero español sobre todo el proveniente de la zona sur le suena, eso sí con otro nombre Alcazaba muy famosas y bellas las de Almería, Granada, Mérida y mi favorita la de Málaga.
Las Kasbahs son edificaciones defensivas que se construían en pasos estratégicos su misión era además de proteger la zona y de avistar posibles ataques, la de dar cobijo a las caravanas que desde el Sahel hasta Europa o Asia distribuían mercancías, los caravaneros pagaban en estas fortalezas por el cobijo y como no podía ser de otro modo hacía intercambios comerciales.
En la actualidad en la Ruta de las Mil Kasbahs se sigue practicando el comercio, aunque ahora las caravanas son de turistas… no te extrañe por tanto si te ofrecen a buen precio: un trocito de cielo, una estrella o el aire que respiras…
La Ruta de las Mil Kasbahs, tiene como punto de partida oficial la ciudad de Ouarzazate, aunque comienza en la que era la última kasbah Marrakech, desde la ciudad roja cruzaremos Tzi Tichka un paisaje montañoso salpicado de casas suspendidas en las montañas, cruzado el segundo paso el paisaje comienza a cambiar tornándose de abobe y ocre, comenzaremos a ver los primero pueblos, con las casas principales adornadas con motivos Bereberes.
En Ouarzazate deberemos visitar la Kasbah Taourirt, antes a unos 30 km habremos visitado el Ksar de Ait Ben Haddou, declarado monumento Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987, una visita obligada si se quiere conocer en esencia la Ruta de las Mil Kasbahs y en el que los aficionados al cine reconocerán escenarios de películas tan famosas como “Lawrence de Arabia en 1962”, “Jesús de Nazareth en 1977”, “La Joya del Nilo en 1985″,”La momia en 1999” y “Gladiator en 2000”.
Nuestra siguiente Kasbah importante es el Ksar de Agdz que desde la altura domina parte del valle del Draâ.
Está enclavada en un espectacular oasis con más 200 kilómetros de largo y que directamente nos conecta con la ciudad de M’Hamid puerta del gran desierto en la que, además de disfrutar los numerosos Ksour pequeños pueblos fortificados.
Continuamos en nuestra ruta y nos detenemos en N’Kob, dentro de un impresionante palmeral se esconden sus casi sta 52 kasbahs y un precioso palmeral.
Mirando hacía las salida del sol nos encontramos con Erfoud, donde sin duda se comen los mejores dátiles del mundo, desde aquí Tinghir en este punto los más aventureros pueden alargar su estancia para disfrutar de la escalada en las Gargantas del Todra en las cercanías nos encontramos con la Kasbah Tizzarouine en el bonito pueblo de Boulmane.
Por decirlo de forma poética, la ruta de las Mil Kasbahs se perfuma con el aroma de la rosa M’Gouna que con esmero cultivan en el valle conocido con de las rosas, aquí visitaremos también las últimas kasbahs en Kelaât M’Gouna y Skoura.